La habitación estaba limpia y con unas vistas a la calle que me gustaron. El desayuno buffet era bastante decente, con opciones variadas que ayudaron a comenzar bien el día.

El ruido proveniente del pasillo era notorio las noches que estuve, además noté que la habitación no tenía nevera ni aire acondicionado, lo que pudo haber hecho las noches más cómodas. En una ocasión, el agua de la ducha pasaba rápidamente de caliente a fría, lo cual fue incómodo durante mi estancia.

Los sándwiches de desayuno Jimmy Dean para llevar son una delicia y perfectos para comenzar la aventura! Además, la limpieza de la habitación fue impecable y el check-in fue rápido, lo que me permitió disfrutar de la ciudad sin preocupaciones.

El ruido en la habitación me quitó un poco de sueño, no solo por el bullicio de la calle, sino también por los vecinos. Además, no hay aire acondicionado, así que imagina lo caluroso que puede ser en verano. Aunque el hotel tiene sus añitos y necesita un poco de amor, sigue valiendo la pena.

buena experiencia pero con detalles por mejorar

La habitación era cómoda y estaba bien limpia, lo que me permitió descansar adecuadamente. Además, la atención del personal fue sobresaliente, siempre dispuesto a ayudar con una sonrisa. La ubicación es excelente, justo al lado de la estación de tren, facilitando el acceso a diferentes puntos de la ciudad.

Sin embargo, el ruido proveniente del pasillo era notorio en algunas ocasiones.

Reservé de último minuto y el check-in fue rapidísimo. La habitación tenía una limpieza impecable y la ducha estuvo genial con un buen secador. Dormí de lujo y el elevador funcionó perfecto. Además, la parada del S está cerca para moverte fácil.

El desayuno buffet ofrecía una buena variedad de opciones, lo que me ayudó a empezar bien el día.

La habitación que me dieron estaba cerca de las escaleras, y el ruido era un poco molesto durante la noche.

El ambiente fue muy acogedor. el personal increíblemente amable y dispuesto a ayudar. Además, la conexión con el transporte público es excelente, lo que hace moverse por la ciudad muy sencillo.

Sin embargo, me gustaría que las cortinas fueran más oscuras para mejorar la calidad del sueño.

Me quedé en el Atrium Charlottenburg por tres noches y la ubicación es genial, justo al lado de la estación de tren. El desayuno buffet era decente y me gustó la limpieza de la habitación, lo que ayudó a que mi estadía fuera agradable.

el barrio tiene buenos cafés cercanos. la acústica no es la mejor.

El hotel tiene una buena conexión con el transporte público y varios sitios de comida alrededor. La habitación era limpia, con un buen desayuno buffet que ofrecía una variedad razonable. El aseo estaba en buenas condiciones, lo que contribuyó a una experiencia agradable en general.

Sin embargo, la falta de aire acondicionado fue un gran inconveniente, especialmente en verano, ya que eso hizo que las noches fueran incómodas. noté que el aislamiento acústico no era el mejor, lo que llevaba a escuchar ruido desde el exterior y el pasillo.

excelente elección para explorar berlí y sus parques cercanos

me alojé en una habitación sencilla por tres noches y disfruté de un desayuno buffet bastante decente, además la cercanía a atracciones como el zoológico de berlín, que está a solo 2.5 km, lo convierte en un punto de partida ideal para caminar por la ciudad y descubrir los maravillosos parques a su alrededor.

Fue una elección de primera para pasear por Berlín con un precio excepcional. Además, el desayuno era variado y sabroso, lo cual me encantó. Recomiendo llevar tapones para los oídos si eres sensible al ruido.